Una pregunta que suelen hacer las personas que buscan una casa de reposición con características que se adapten mejor a su estilo de vida actual es:
¿Qué debo hacer primero?
Hay un método que funciona para todos dependiendo de su situación, pero en Gaudí House solemos recomendar vender primero.
Pero cuando nos esforzamos por brindar la seguridad que tanto necesitamos como es en áreas básicas de la vida como es el hogar, que muchas veces caemos en errores y nos damos cuenta estamos actuando de la manera menos segura posible.
Analicemos cada situación a fondo. Contrariamente al instinto, vender primero tiene muchos beneficios. En el mundo inmobiliario, una ventaja cuya explotación nos parece muy importante. De hecho, en Gaudí House, y como agencia inmobiliaria destacada en Barcelona casi siempre recomendamos vender primero.
“QUIERO COMPRAR UNA CASA NUEVA PERO PARA ELLO NECESITO VENDER LA MÍA”
Digamos que está buscando una casa de reemplazo porque quiere comprar antes de vender. ¿Qué suele pasar? Bueno, si no tiene la capacidad financiera para afrontar la compra sin vender su propiedad, estará asumiendo un riesgo con el pago inicial. Cualquier cosa que pueda hacerle perder el dinero invertido. La legislación contractual catalana prevé la posibilidad de rescindir un contrato si no se puede encontrar financiación, pero los propietarios a menudo no están dispuestos a firmar a menos que proporcionen una garantía. O, si firma un contrato, ¿protegerán de alguna manera su contrato para que no pierda el tiempo y lo cubrirán si la venta fracasa?
Por otro lado, si ya vendió su vivienda, sabrá exactamente cuánto dinero hay disponible para la compra de su nuevo hogar. O, si aún necesita una hipoteca, puede aclarar el total del préstamo. Y para saber con seguridad si le permitirán hacerlo. Si tiene una deuda pendiente, también puede cancelarla antes de pedirle a su banco otro acuerdo. Este poder económico también le otorga más margen para negociar con los propietarios.
Para evitar frustraciones, es importante saber cómo es el mercado inmobiliario en la zona donde vive o busca vivienda. De esta forma, sus expectativas serán más realistas. Además, siempre se deben considerar los impuestos y los costes de adquisición. Si sus cálculos son correctos y tu situación es buena, las cosas suelen salir como se espera y los contratiempos se resuelven.
En cuanto a la desventaja más preocupante de la opción de vender primero, es decir, no tener un techo sobre la cabeza, es posible, por ejemplo, acordar un período de arrendamiento más largo con el nuevo comprador para tener más tranquilidad a la hora de buscar una vivienda. Si necesita dejar la propiedad definitivamente y aún no ha encontrado un nuevo lugar para vivir, puede utilizarla como espacio de almacenamiento, mudarse con familiares o amigos, o mudarse a un apartamento temporal, alquilándolo a medida que avanza su búsqueda. Pero es importante hacerlo y no precipitar tu decisión tratando de evitar este coste: valdrá la pena la inversión cuando la recupere en forma de satisfacción, tranquilidad y horas de sueño.